La puertas del diseño hacia…

Percibo, creo y siento que:

– En el sistema educativo, el pensamiento de diseño puede transformar nuestras prácticas como tecnólogos educativos, es posible pensar el diseño como estrategia de cambio desde el propio oficio del tecnólogo educativo. Y en este sentido pensamos en el diseño también como una práctica social y como potenciador de procesos de construcción de saber.

– El pensamiento de diseño es un proceso al que los tecnólogos educativos no vinculamos de manera directa. Se trata de una perspectiva, una manera de mirar al mundo y a la educación. El pensamiento de diseño lo podemos aportar/sumar en los proyectos, en las actividades, en la distribución espacial de la escuela y aulas, en el mismo Diseño Curricular, en las diferentes áreas curriculares, en la tecnología, en los vínculos, en la vida.

– La metáfora de las capas es parte del proceso de diseño, construir en capas, vincular diferentes narrativas, lenguajes y miradas es posible. Aquí, las tecnologías aportan su magia permiten potenciar y mucho, este tipo de construcciones. Desafío del oficio!

– Podemos pensar, crear y diseñar propuestas solos, por nuestra cuenta, pero las buenas ideas surgen de un proceso creativo participativo en el que se implica a diferentes personas. Solos lo podemos hacer pero  con otros, en equipo, llegaremos más lejos.

– Ojo! El espacio físico que transitamos y recorremos a diario puede estimular y mucho nuestra creatividad cuando estamos pensando/diseñando/imaginando un proyecto. Miremos y observemos nuestro alrededor.

–  Para llevar la mente a un estado de creación de múltiples posibilidades,  ideas e inspiración, debemos aprender a dejar de lado la autocrítica y la  autocensura. Animarnos, confiar y dejarlas fluir. ¿Comenzamos?